Como su mismo autor lo dice, el informe Rudolf es un «improved Leuchter Report»[1] (informe Leuchter mejorado) que, a diferencia de este último, intenta rebatir el uso de las cámaras de gas de Auschwitz como cámaras homicidas principalmente a partir de la ausencia de residuos de HCN, en forma de manchas, en sus paredes; cosa que sí se puede apreciar en las cámaras de despiojamiento. Germar Rudolf alega que, debido al reiterado uso de las cámaras de gas para asesinar personas y a las cantidades de Zyklon B que según los testigos fueron utilizadas, estas cámaras de gas deberían presentar en sus paredes residuos similares a los que se hallan hoy en día en las cámaras de despiojamiento, independientemente de si es posible o no ejecutar personas con concentraciones menores que las necesarias para eliminar insectos.

Otro «hallazgo» de Germar Rudolf en su informe, según metapedia, sería la imposibilidad de incinerar cuerpos al aire libre en fosas comunes en Auschwitz, tal y como lo describe la versión oficial de la historia, debido a la extrema humedad de este terreno, en donde el agua empieza a brotar a profundidades de apenas 60 o 70 cm, y que se corrobora con «abundante documentación alemana de la época»[2].

Finalmente, Rudolf sostiene que las supuestas cámaras de gas de Auschwitz no tenían ningún medio para la introducción de mezclas de gases venenosos, y que los famosos hoyos en los techos se hicieron sólo después de la guerra; cosa que, por supuesto, plantearía una enorme dificultad al cómo se introdujo el gas asesino en las cámaras de gas, y haría temblar, de hecho, a gran parte de la investigación que sostiene esta historia.

Tal como el informe Leuchter, el informe Rudolf, aunque aparentemente mejor elaborado que el primero, está por completo desacreditado en el mundo académico, en especial gracias a los trabajos del doctor en química Richard J. Green; algo que los negacionistas hispanos, por sus constantes aseveraciones de que el informe Rudolf «no ha podido ser refutado científicamente»[3], parecen no saber todavía. Tal vez aquí se encuentre el motivo de que en la web anglohablante no se hallen tantos websites que apoyen las teorías de Germar Rudolf; después de todo, no ha habido nadie en Latinoamérica o España que haya hecho una apología masiva de las investigaciones de Green. De cualquier manera, voy a utilizar éstas y otras para exponer por qué los «descubrimientos» de Germar Rudolf no refutan absolutamente nada.

El caso de Germar Rudolf

Contrario a lo que piensan negacionistas y desinformados, Germar Rudolf no fue procesado en Alemania sólo por «exponer sus ideas», sino por violar la sección 130 del código penal alemán respecto a la incitación al odio y/o la instigación de masas, cosa enteramente distinta. Puede considerarse que los apartados de la mencionada sección que quebranta el informe del nacido en Limburgo de Lahn son los siguientes:

(1) Quienquiera que pueda perturbar la paz pública…

2. Atacando la dignidad humana de otros abusando verbalmente, o difamando a un grupo, a partes de la población o a un individuo, por pertenecer a un grupo o a una parte de la población…

Se castiga con pena de prisión de tres meses a cinco años.

(2) El encarcelamiento de hasta tres años o una multa se aplicará a quienes

1. Difundan o pongan a disposición del público u ofrezcan, proporcionen o pongan a disposición de una persona menor de dieciocho años un documento que:

c) Ataque, mediante abuso, desprecio o calumnia maliciosa, la dignidad humana de las personas o mayorías a las que se hace referencia en el punto (a)

(3) Con prisión de hasta cinco años o una multa será castigado quien publique, niegue, minimice o endose públicamente un acto cometido bajo la norma del nacionalsocialismo del tipo especificado en la Sección 6 (1) del Código de Derecho Penal, de una manera que pueda perturbar la paz pública.[4]

Ahora, para saber en qué manera el informe Rudolf infringió la sección 130 del código penal alemán, podemos ir hasta el documento del veredicto de Stuttgart traducido por J. M. Damon para encontrarnos a un Otto-Ernst Remer[5] que escribía en el prefacio que las historias del holocausto eran mentiras destinadas a chantajear al pueblo alemán, que eran una distorsión histórica increíblemente satánica a la que los políticos y los medios de comunicación han contribuido durante décadas en detrimento del pueblo alemán. El veredicto continúa diciendo que:

El «Informe de expertos» con prefacio y epílogo comprende una unidad que niega la persecución de las víctimas del Nacionalsocialismo y, por lo tanto, viola su dignidad asociada con su destino. Además, el trabajo denigra la memoria de aquellos que murieron como resultado de la persecución nacionalsocialista. Finalmente, el trabajo afirma que el Holocausto fue un invento de círculos de intereses especiales con el propósito de impulsar objetivos económicos y políticos. Sobre la base de las convicciones antisemitas, afirma indirectamente que los judíos extranjeros y alemanes han acusado de manera conjunta, inteligente y falsamente al pueblo alemán de crímenes horrendos por razones egoístas. Al hacerlo, el trabajo alega que los judíos en general son deshonestos. De esta manera, incita al odio calculado contra los judíos.

Cita Original:

The «Expert Report» with Preface and Epilogue comprise a unity which denies persecution of the victims of National-Socialism, and hence violates their dignity associated with their fate. In addition, the work denigrates the memory of those who died as a result of National Socialist persecution. Finally, the work claims that the Holocaust was an invention of special interest circles for the purpose of pushing through economic and political goals. Building on anti-Semitic convictions, it indirectly claims that foreign and German Jews have jointly, wittingly and falsely accused the German people of horrendous crimes for selfish reasons. By so doing, the work alleges that Jews in general are dishonest. In this way, it incites calculated hatred against Jews.[6]

El documento traducido por Damon expone al detalle las estrategias seguidas por Rudolf y sus antisemitas colaboradores para publicar su informe y otros escritos negacionistas camuflados con supuestas intenciones científicas –como hacer publicaciones bajo falsas identidades e inventar discusiones entre supuestos expertos sobre las consecuencias para la historia del informe Rudolf–, lo que da cuenta de que probablemente la intención del primero nunca fue encontrar la verdad de lo sucedido en Auschwitz, sino promover ideas negacionistas del holocausto; hecho que queda corroborado más todavía a partir de la relación y colaboración de Rudolf con ultraderechistas y antisemitas como el propio Remer, Karl Philipp[7], Achmed Rhami[8] y otros. Para Rhami escribió un artículo que contenía lo siguiente:

Si el Holocausto es visto como una colección única de mentiras, entonces el único pilar que apoya la legitimidad del judaísmo internacional colapsará. El ídolo de la religión sustituta se desintegrará. La posibilidad de extorsionar más miles de millones de Alemania debido a su supuesta obligación también colapsará. La posibilidad de obligar a Estados Unidos a rescatar eternamente a los judíos de los nuevos Holocaustos a través de un sinfín de donaciones de dinero también colapsará. La simpatía mundial por los mayores mentirosos y estafadores en la historia de la humanidad también colapsará. El segundo intento de Europa de establecer un enclave duradero en Palestina contra la voluntad de los árabes, similar a las cruzadas, también colapsará. Y, por último, la futura Arabia, que se unificará y se autogestionará sin ocupantes judíos, estadounidenses o europeos y las potencias coloniales, se desarrollará de manera irresistible. Esto explica por qué los medios y los políticos dominados por judíos y judíos en todo el mundo defienden estas mentiras (del Holocausto) y reprimen a los profetas de la verdad por todos los medios posibles.

Cita Original:

If the Holocaust is seen as a unique collection of lies, then the sole pillar supporting international Judaism’s legitimacy will collapse. The idol of substitute religion will disintegrate. The possibility of extorting more billions from Germany on account of its alleged obligation will likewise collapse. The possibility of obligating America to eternally rescue the Jews from new Holocausts through endless donations of money will likewise collapse. World sympathy for the greatest liars and swindlers in the history of mankind will likewise collapse. Europe’s second attempt to establish a lasting enclave in Palestine against the will of the Arabs, similar to the crusades, will likewise collapse. And finally, the future Arabia, which will be unified and self ruling without Jewish, American or European occupiers and colonial powers, will develop irresistibly. This explains why the Jews and Jewish dominated media and politicians everywhere defend these (Holocaust) lies and repress the prophets of truth by all means possible.[9]

De la lectura del veredicto de Stuttgart se comprende que Germar Rudolf y su investigación jamás fueron imparciales, y que este hombre, tal como el negacionista promedio, cometió el error de intentar rebatir la persecución de judíos a manos de los nazis sólo a partir de sus «descubrimientos» en los campos de concentración de Auschwitz –ignorando, obviamente, la enorme cantidad de evidencia que avala lo contrario–, cosa que por sí sola no le habría significado el viaje de más de 2 años que, en 2007, tuvo que realizar a prisión; puesto que en Alemania, en oposición a lo que alegan conspiracionistas y negacionistas, no se condena la propagación del nazismo, del racismo, o de ideas discriminatorias, si no se comprueba que éstas atentan contra la paz pública. 

En la gran mayoría de países de Europa, a decir verdad, las legislaciones en contra de la incitación al odio, la difamación y el racismo son bastante comunes, y países como Francia, Rusia, Bélgica y Polonia condenan de forma expresa la negación del holocausto; en este sentido, uno puede comprobar hasta cierto punto que la legislación alemana y los juicios contra negacionistas no derivan de un capricho político ni mucho menos del supuesto control de los judíos sobre los gobiernos. 


[1] Metapedia. Rudolf report. https://en.metapedia.org/wiki/Rudolf_report

[2] Metapedia. Informe Rudolf; Hallazgos. https://es.metapedia.org/wiki/Informe_Rudolf. Una documentación que en este artículo nunca se expone.

[3] Ibídem; (primera parte).

[4] Bundesministerium der Justiz und für Verbraucherschutz. Bundesamt für Justiz (Ministerio federal de justicia y protección al consumidor. Oficina federal de justicia). Código penal (StGB); Sección 130. http://www.gesetze-im-internet.de/stgb/BJNR001270871.html#BJNR001270871BJNE028206377.

[5] Conocido antisemita ex oficial de la Wehrmacht.

[6] J. Damon. Translation of Stuttgart veredict (2001), p. 7. 

[7] Que, según el documento del veredicto de Stuttgart, es un conocido antisemita.

[8] Antisemita de origen marroquí, jefe de la emisora «radio islam» en Suecia.

[9] J. Damon op. cit. (6),p. 39.