En cuanto al cuestionamiento negacionista de por qué no ha habido investigación forense en Babi Yar que certifique que allí murieron tantas personas como lo manifiesta la historia oficial, la contestación, aunque sustentada desde hechos distintos, es bastante simple; para empezar los nazis cubrieron gran parte de las pruebas de su crimen, exhumando y quemando cadáveres a través del grupo de prisioneros denominado Sonderaktion 1005, y como bien lo testificó en Núremberg el jefe del Sonderkommando 4A, Paul Blöbel:
Debido al ascenso de la línea del frente, no fue posible destruir las fosas comunes más al sur y al este que resultaron de las ejecuciones de los Einsatzgruppen. Viajé a Berlín a este respecto para informar, y luego fui enviado a Estonia por el jefe de grupo Mueller. Transmití las mismas órdenes al coronel Achammer-Pierader en Riga, y también al general de infantería Jeckeln. Regresé a Berlín para obtener combustible. La quema de los cuerpos comenzó sólo en mayo o junio de 1944. Recuerdo que las incineraciones tuvieron lugar en el área de Riga y Reval. Estuve presente en tales incineraciones cerca de Reval, pero las tumbas eran más pequeñas aquí y contenían sólo de 20 a 30 cuerpos. Las tumbas en el área de Reval estaban a unos 20 o 30 km. Al este de la ciudad, en un distrito pantanoso, creo que se abrieron 4 o 5 de esas tumbas y se quemaron los cuerpos.
Cita Original:
Owing to the moving up of the front-line it was not possible to destroy the mass graves further south and east which had resulted from executions by the Einsatzgruppen. I traveled to Berlin in this connection to report, and was then sent to Estonia by Gruppenfuehrer Mueller. I passed on the same orders to Oberfuehrer Achammer-Pierader in Riga, and also to Obergruppenfuehrer Jeckeln. I returned to Berlin in order to obtain fuel. The burning of the bodies began only in May or June 1944. I remember that incinerations took place in the area of Riga and Reval. I was present at such incinerations near Reval, but the graves were smaller here and contained only about 20 to 30 bodies. The graves in the area of Reval were about 20 or 30 kms. east of the city in a marshy district and I think that 4 or 5 such graves were opened and the bodies burned.[1]
Luego, como segunda razón de la imposibilidad del estudio forense de la masacre de Babi Yar, tenemos las decisiones tomadas por los líderes comunistas de la URSS de modificar el sitio de la masacre y de, eventualmente, rellenarlo –recuérdese que era un barranco– para erigir edificaciones sobre él; como el estadio y la presa de agua en un extremo de éste ordenado por las autoridades en 1956[2], y tal como lo expone Anatoly Kuznetsov en su obra Babi Yar: A Document in the Form of a Novel:
Ellos, (los soviéticos), construyeron un embalse alrededor de los límites de Babi Yar y empezaron a bombear una mezcla de agua y barro hacia el interior del barranco mediante tubos provenientes de las canteras cercanas de las fábricas de ladrillos. El barranco se transformó en un lago… El agua en el lago olía muy mal, era verde y estaba estancada, además, el ruido de la mezcla de agua y barro que salía de los tubos no cesaba nunca. Esto duró varios años. Cada año, el barranco crecía en tamaño… (hasta que tuvo) la altura de un edificio de seis pisos.[3]
A diferencia del estadio, que al parecer nunca llegó a un feliz término –pues no hay información que indique lo contrario–, la construcción de la presa dio paso a un enorme lago, que, por desgracia, no duró demasiado, puesto que al poco tiempo colapsó, provocando que entre los kievitas surgiera la creencia de que se trataba de una venganza de los otrora asesinados en el lugar. Kuznetsov nos dice a este respecto:
El lunes 13 de marzo de 1961 (el lago) colapsó. Las lluvias de la primavera se habían escurrido hacia el barranco e inundaron el lago que empezó a desbordar; los canales no pudieron contener el volumen de agua que supero el embalse. Una pared de nueve metros (30 pies) de agua, barro y desechos se precipitó por el barranco a la velocidad de un tren expreso. La pared de barro y agua barrió con todo el barrio de Kurenivka… Las casas que quedaron en el camino de la ola fueron barridas como si estuvieran hechas de cartón. Algunos tranvías fueron arrastrados por el agua varios kilómetros y luego quedaron enterrados. Lo mismo sucedió con la terminal de tranvía, el hospital, el estadio (lo que se había construido de él), una fábrica de instrumentos y todo el barrio residencial.[4]
Como una prueba adicional de la referida inundación, Sévane Garibian, Elisabeth Anstett y Jean-Marc Dreyfus, en una publicación llamada Restos humanos e identificación. Violencia de masa, genocidio y el «giro forense», nos dicen, citando a Karel Berkhoff en Lessons and Legacies, que «desenterró cientos de cuerpos que luego fueron enterrados nuevamente sin ningún intento de identificación»[5].
Posterior a la inundación, según Lucy Dawidowicz, en un artículo publicado en septiembre de 1981 para el New York Times:
Mientras tanto, sin desanimarse, las autoridades de Kiev en 1962 reanudaron el trabajo en Babi Yar. El plan para un estadio deportivo en el sitio fue abandonado; en cambio, el área fue simplemente rellenada y nivelada. Las excavadoras fueron enviadas. Continuaron apareciendo huesos enredados en alambre de púas. Después de cuatro años, el proyecto fue hecho: Babi Yar fue borrada. El antiguo cementerio judío cercano también fue arrasado y se erigió un centro de televisión en sus terrenos. Apartamentos fueron construidos cerca del sitio. El resto de la zona quedó desolada.
Cita Original:
Meanwhile, undaunted, the Kiev authorities in 1962 resumed work at Babi Yar. The plan for a sports stadium on the site was abandoned; instead, the area was simply to be filled in and leveled off. The bulldozers were dispatched. They kept turning up bones tangled in barbed wire. After four years, the project was done: Babi Yar was erased. The old Jewish cemetery nearby was also levelled and a television center erected on its grounds. Apartment houses were built near the site. The rest of the area remained desolate.[6]
Kuznetsov es, si se quiere, un tanto más preciso que Dawidowicz en cuanto a lo sucedido luego del desborde del lago, donde afirma que murieron entre 1500 y 2000 personas:
Se trajo muchísima maquinaria a Babi Yar, excavadoras, topadoras, camiones de relleno y máquinas perforadoras. Se volvió a rellenar el barranco, y parte del suelo se colocó en la zona que había sido destruida. Finalmente se rellenó Babi Yar y en su lugar se construyó una ruta principal… En el lugar donde estaba el campo de concentración construyeron un nuevo complejo con viviendas, construidas sobre huesos, como podrán imaginarse. Cuando estaban cavando para colocar los cimientos se encontraron con huesos, a veces atrapados en alambre de púa. Las ventanas y los balcones de la primera hilera de estas casas están orientados hacia el lugar donde sucedieron las masacres masivas de los judíos en 1941… el cementerio judío fue destruido. Las excavadoras trabajaron en ese enorme cementerio y limpiaron todas las tumbas y lápidas, desenterrando huesos y ataúdes de zinc a medida que avanzaban. Donde estaba el cementerio empezaron a construir las instalaciones para un centro televisivo, equipado con las últimas tecnologías…. En el centro de toda esta instalación, en el lugar, ahora rellenado, donde sucedieron las ejecuciones, comenzaron a delinear un nuevo estadio y un gran parque de diversiones… El plan de construcción del estadio no llegó a completarse. En este momento, no hay actividad alguna en aquel lugar maléfico. Entre el complejo de viviendas, que se encuentra dónde estaba el campo, por un lado, y el centro televisivo, que se encuentra dónde estaba el cementerio, por el otro, ahora hay un enorme espacio desierto, cubierto de bardana y zarza. Así fue como Babi Yar desapareció.[7]
Esta suerte de renovación de Babi Yar por parte del gobierno de la URSS, unos años luego de acabarse la guerra, forma parte, evidentemente, de la judeofobia presente en la sociedad soviética de entonces –que probablemente provenía del antisemitismo del imperio ruso y sus conocidos pogromos, y que se puede evidenciar en incidentes como el de Topolcany de 1945[8]– y de las políticas antijudías del partido comunista en su consideración de los integrantes de esta minoría étnica (judíos) como «cosmopolitas sin raíces»[9], «cosmopolitas burgueses», «serviles al imperialismo u occidente», «capitalistas», entre otros.
Y es que, para sorpresa de los negacionistas que meten dentro de un mismo saco a judíos y bolcheviques, estos últimos, a pesar de utilizar como estandarte antes, durante y después de la revolución rusa[10], una posición contraria hacia el antisemitismo mundial –que hoy en día es tema de debate, pues, pese a que abolieran leyes antijudías de la Rusia imperial y penaran toda judeofobia, llamando al mismo tiempo a los campesinos a fraternizar con los judíos, permitían los asesinatos de éstos en Ucrania y Bielorrusia, por ejemplo[11]– siempre tuvieron sus recelos hacia los descendientes de hebreos. En especial, dicen algunos analistas, después de la disputa por el poder entre Stalin y León Trotsky, tal vez el hombre con herencia judía más poderoso dentro del partido comunista, primero de Rusia y luego de la Unión Soviética. Aunque también hay quienes dicen que Stalin, según los escritos de Boris Bajanov, su secretario personal entre 1923 y 1925, y las críticas de Nikita Jrushchov, exhibía ideas antisemitas incluso antes de la muerte de Lenin.
A pesar de que la Unión Soviética fue el segundo país en reconocer la independencia del estado de Israel, en 1948, la postura y las políticas antijudías del partido comunista comenzaron apenas terminada la segunda guerra mundial, con la resistencia a hablar del holocausto como un crimen en contra de los judíos en lugar de crimen en contra de los soviéticos y, en especial, con la prohibición del libro negro de Ilyá Ehrenburg y Vasili Grossman en 1947[12][13], la disolución del comité judío antifascista en 1948[14][15], y la persecución de sus miembros antes y después de ello.
Posteriormente, quizá motivado por la cercana relación entre Israel y Estados Unidos, su principal enemigo occidental, Stalin desató su «antisionismo» –término que llegó a utilizarse en la URSS para disfrazar el antisemitismo, y que, a decir verdad, no se diferenciaba demasiado de éste– en 1948 con la campaña contra los cosmopolitas sin raíces[16], que deparó en lamentables sucesos como la llamada noche de los poetas asesinados[17] de 1952 y el complot de los médicos de 1953. En esos años también se llevaron a cabo persecuciones contra judíos dentro de las ciencias, la política y las fuerzas armadas, el Kremlin incluso llegó a negarle el derecho de emigración a gran parte de esta comunidad.
Sin duda Iósif Stalin, como Hitler –y no pocos negacionistas de hoy en día–, creyó en su momento en una conspiración judía mundial que planeaba derrocarlo, como lo demostraron, por ejemplo, el proceso de Praga[18] de 1952, la propaganda antijudía diseminada por el diario Pravda[19] en 1953 –e incluso antes–, y el discurso que dio en diciembre de 1952 ante el politburó: «Every Jewish nationalist is the agent of the American intelligence service. Jewish nationalists think that their nation was saved by the USA (there you can become rich, bourgeois, etc.). They think they’re indebted to the Americans. Among doctors, the are many Jewish nationalists»[20] (Todos y cada uno de los nacionalistas judíos son agentes de los servicios de inteligencia americanos. Los nacionalistas judíos creen que su nación fue salvada por los Estados Unidos (donde uno se puede hacer rico, burgués, etc.). Creen que tienen una deuda con los americanos. Entre los médicos hay muchos nacionalistas judíos).
Después de la muerte de Stalin, si bien la judeofobia en la URSS perdería intensidad, la postura rígida del partido comunista hacia esta minoría seguiría vigente, como se demostró en la decisión de Jrushchov de negar, una vez más –la primera tuvo lugar después de la guerra, cuando Jrushchov era el líder del partido comunista en Ucrania–, la construcción de un monumento conmemorativo para los judíos asesinados en Babi Yar[21]; en la crítica del nuevo líder soviético a Yevgueni Yevtushenko por crear un poema sobre lo sucedido en Kiev «as if only Jews were the victims of the fascist atrocities»[22] (como si sólo los judíos fueron las víctimas de las atrocidades fascistas); y en la campaña que este sucesor de Stalin emprendió contra comerciantes judíos en 1961, acusándolos de «crímenes económicos»[23].
Dawidowicz, en el mencionado artículo publicado para el New York Times, nos dice sobre el trato a los judíos en la Unión Soviética post-Stalin que:
Bajo Jrushchov, el antisemitismo oficial tenía la intención de servir a objetivos políticos nacionales y la mayor parte de la propaganda estaba dirigida contra el judaísmo y no contra Israel y el movimiento sionista. Bajo Brezhnev, el antisemitismo estaba mucho más sincronizado con la política exterior soviética, y la propaganda antisemita soviética se concentró casi exclusivamente en el sionismo y el estado de Israel como elemento central del supuesto complot judío para tomar el control del mundo. Los objetos de ataque ahora incluían no sólo a los judíos en la Unión Soviética sino también a los judíos de todo el mundo, y particularmente a los de Israel. Además, si bien el antisemitismo soviético oficial había estado destinado, bajo Jrushchov, únicamente para el consumo del mercado interno, ahora el antisemitismo soviético también estaba destinado a la exportación, para su difusión mundial a los árabes, al tercer mundo, a todos los pueblos desafectos.
Original:
Under Khrushchev, official anti-Semitism had been intended to serve domestic political goals and most propaganda was directed against Judaism rather than against Israel and the Zionist movement. Under Brezhnev, anti-Semitism was to a much greater extent synchronized with Soviet foreign policy, and Soviet anti-Semitic propaganda concentrated almost exclusively on Zionism and the state of Israel as central to the alleged Jewish plot to seize control of the world. The objects of attack now included not only the Jews in the Soviet Union but Jews the world over, and particularly those in Israel. Moreover, while official Soviet anti-Semitism had, under Khrushchev, been intended solely for the consumption of the home market, now Soviet anti-Semitism was designed for export as well – for worldwide dissemination to the Arabs, to the third world, to all disaffected peoples.[24]
Así pues, y volviendo al tema que nos ocupa, ¿Cómo creen los negacionistas que era posible efectuar una investigación forense de la masacre de Babi Yar en aquel contexto de judeofobia social y, si se quiere, judeo-control a nivel político, de fuerte restricción y manipulación de información, y de anti-occidentalismo, que imperaba en la Unión Soviética posguerra? Dudo que hubiera forma de que tal cosa ocurriera; de aquí que 1976 fuera el año en que la URSS por fin decidiera construir un monumento conmemorativo para las víctimas de Babi Yar, y no refiriéndose a los judíos, sino a los soviéticos en general[25]. Se tuvo que esperar hasta 1991 para que un gobierno ucraniano independiente, con la URSS ya acabada, reconociera que el barranco a las afueras de Kiev fue escenario del holocausto[26] –nótese que la renuencia del gobierno soviético a hablar sobre Babi Yar como el sitio de una masacre judía no implicó nunca que negaran el holocausto ni nada por el estilo–.

[1] Yad Vashem. Evidence by Blöbel on the Burning of Bodies and Obliterating the Traces of Bodies of Jews Killed by the Einsatzgruppen. https://www.yadvashem.org/docs/evidence-on-burning-bodies-of-jews-killed-by-einsatzgruppen.html
[2] Richard Sheldon, Final Report to National Council for Soviet and East European Research. The transformations of Babi Yar, Executive summary. https://www.ucis.pitt.edu/nceeer/0000-801-15-Sheldon.pdf.
[3] Holocaust Denial on Trial (HDOT). Babi yar: Pruebas físicas; ¿Por qué no podemos desenterrar las fosas masivas hoy en día? https://www.hdot.org/debunking-denial/babi-yar-pruebas-fisicas/?lang=es#_edn4.
[4] Ídem.
[5] Sévane Garibian, Élisabeth Anstett, Jean-Marc Dreyfus. Restos humanos e identificación, violencia de masa, genocidio y el «giro forense» (2017), p. 11.
[6] Lucy Dawidowicz; New York (NY) Times. Babi Yar’s legacy, 1981. https://www.nytimes.com/1981/09/27/magazine/babi-yar-s-legacy.html.
[7] HDOT op. cit. (3).
[8] Pogromo que tuvo lugar en Eslovaquia el 24 de septiembre de 1945, en el que 47 judíos resultaron heridos y 15 tuvieron que ser hospitalizados.
[9] Este término fue, de hecho, bastante empleado para acusar a los judíos de antipatriotismo.
[10] Conjunto de acontecimientos sociales que condujeron al derrocamiento del régimen zarista en el imperio ruso, y a la creación de la República Socialista Federativa Soviética de Rusia.
[11] Werth Nicolas; portal: Sciencespo. Crimes and Mass Violence of the Russian Civil Wars (1918-1921). https://www.sciencespo.fr/mass-violence-war-massacre-resistance/en/document/crimes-and-mass-violence-russian-civil-wars-1918-1921.
[12] También conocido como el libro negro de los judíos rusos, era un texto que documentaba los crímenes antijudíos del holocausto y la participación de los judíos en el movimiento de resistencia contra los nazis durante la segunda guerra mundial.
[13] The Yivo Encyclopedia of Jews in Eastern Europe. Black Book. http://www.yivoencyclopedia.org/article.aspx/Black_Book.
[14] Organización creada en 1942 en la unión soviética para incrementar el apoyo político occidental a esta república en contra de la Alemania nazi.
[15] The Yivo Encyclopedia of Jews in Eastern Europe. Jewish Anti-Fascist Committee. http://www.yivoencyclopedia.org/article.aspx/Jewish_Anti-Fascist_Committee.
[16] The Yivo Encyclopedia of Jews in Eastern Europe. Anticosmopolitan Campaign. http://www.yivoencyclopedia.org/article.aspx/Anticosmopolitan_Campaign
[17] Yivo Institute for Jewish Research. Night of the murdered poets. https://yivo.org/Night-of-the-Murdered-Poets.
[18] The Yivo Encyclopedia of Jews in Eastern Europe. Slánský Trial. http://www.yivoencyclopedia.org/article.aspx/Slansky_Trial.
[19] Antonella Salomoni; prensa digital: Quest. Issues in Cotemporary Jewish History, Journal of Fondazione CDEC. State-sponsored Anti-Semitism in Postwar USSR. Studies and Research Perspectives. http://www.quest-cdecjournal.it/focus.php?id=212.
[20] Albert S. Lindemann, Richard S. Levy. Antisemitism, a history (2010), p. 187-188.
[21] Sheldon op. cit. (2).
[22] Ibidem, p.26.
[23] The Yivo Encyclopedia of Jews in Eastern Europe. Economic Trials. http://www.yivoencyclopedia.org/article.aspx/Economic_Trials.
[24] Dawidowicz op. cit. (6).
[25] Sheldon op. cit. (2), p.33.
[26] Michael Berenbaum, Encyclopedia Britannica. Babi Yar, Massacre site, Ukraine. https://www.britannica.com/place/Babi-Yar-massacre-site-Ukraine.
[27] Flickr. Jewish Monument – Babi Yar, Kiev. https://www.flickr.com/photos/dbmmedia/5075550997/